Profesores y alumnos muestran en Zaragoza cómo aprender a emprender en la escuela
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En la Jornada de Buenas Prácticas Aprender a Emprender organizada por la Fundación Princesa de Girona (FPdGi), en colaboración con la Fundación Trilema
- Se han compartido los proyectos de emprendimiento ético-social que han desarrollado en sus centros los más de 50 profesores que asistieron al curso ‘Educar el Talento Emprendedor 2015’ en Zaragoza
- Una guía turística y artística de Madrid, un servicio de mediación entre iguales, una aplicación móvil para facilitar la lectura, un programa de radio y un museo sobre el Camino de Santiago, son los proyectos emprendedores presentados en la jornada
Zaragoza ha acogido hoy la Jornada de Buenas Prácticas Aprender a Emprender organizada por la Fundación Princesa de Girona (FPdGi), con la colaboración de la Fundación Trilema, para promover el intercambio de buenas prácticas y experiencias de éxito y aprendizaje entre los profesores formados en el curso ‘Cómo educar el talento emprendedor 2015’. La directora de la Fundación Princesa de Girona, Mònica Margarit, que ha presidido el encuentro, ha destacado que “con este programa perseguimos que los niños y niñas de ahora sean en el futuro ciudadanos con la capacidad de adaptarse a un mercado laboral cambiante y a una sociedad en constante transformación”.
Para ello, ha recalcado Margarit, “debemos promover un cambio educativo y educar a los niños de forma que tengan todas las herramientas que necesitan para afrontar su vida futura”. Como ejemplo de estas nuevas formas de educar, los profesores y alumnos participantes en esta iniciativa han presentado los proyectos de emprendimiento ético-social realizados, “proyectos muy innovadores, originales que a partir de ahora formarán parte de la práctica habitual de los centros educativos”, ha afirmado la directora de la FPdGi.
La coordinadora del Área de Emprendimiento de la Fundación Trilema, encargada de la dirección pedagógica de este curso, Inmaculada Castaño, la asesora técnica docente de la Consejería de Educación del Gobierno de Aragón, Inmaculada Chabbar, y el subdirector de Ibercaja Obra Social, Juan Carlos Sánchez, también han participado en esta jornada que ha contado con la ponencia de Ismael Pantaleón, experto en creatividad y director de Ideas Infinitas.
Mediante presentaciones, talleres y paneles explicativos, esta jornada ha permitido poner en común los proyectos emprendedores implantados en sus centros por los más de 50 profesores que asistieron en Zaragoza a la formación inicial de este programa. Así, los asistentes han compartido y reflexionado sobre las claves de éxito de estas iniciativas de emprendimiento ético-social llevadas al aula que permiten desarrollar en los alumnos la autonomía, capacidad de liderazgo e innovación, y las habilidades necesarias para emprender proyectos de mejora real de su propia vida y del mundo que les rodea.
Proyectos presentados
Cinco centros educativos han presentado sus microproyectos de emprendimiento para compartir su experiencia. El Colegio Hijas de San José de Zaragoza ha expuesto su proyecto ‘Objetivo Madrid’ que incluye una guía turística de la ciudad y manifiestos en defensa del arte en forma de rap, performance, vídeos o juegos vía Twitter, así como la rehabilitación de un muro del parque Delicias de Zaragoza. El CEIP Sancho Ramírez de Huesca ha presentado su servicio de mediación entre iguales realizado bajo el proyecto ‘Tú puedes ser mediador’. Estos dos proyectos han recibido un Diploma de Mención Especial y han sido seleccionados para presentar su trabajo en el Fórum Impulsa 2015 de la FPdGi.
También se ha presentado el proyecto de radio escolar ‘321 Prim Eso Radio’ del colegio Condes de Aragón de Zaragoza, y la aplicación móvil para facilitar la lectura a personas con Síndrome de Down desarrollada gracias al proyecto ‘La lectura: un derecho de tod@s’ del Colegio Carmelitas Sagrado Corazón de Vitoria. Además, el colegio Santa Ana de Estella ha expuesto su proyecto ‘¿Llevas la concha?’ que analiza el impacto del camino de Santiago en la ciudad e incluye museo y personalización de una concha como credencial de peregrinaje.